A tu Lado
Como
cada domingo, lo mejor es la mañana. El despertar sin prisas, sin agobio,
disfrutando de los últimos momentos de calidez en la cama. Siempre despierto o
creo que estoy despierta. Me vuelvo hacia tu lado y sin abrir los ojos, sé que
ya no estás junto a mí. Ya no me enfado, sonrío en mi sueño y te espero. Sé que
volverás. Pronto aparecerás, lo sé. Te escucho poner la mesa: platos y cubiertos ruidosos. Sé que quieres que me despierte, pero te hago esperar. No siento el olor del café, mi eterno aliado. Entonces escucho el sonido del batidor mientras preparas mi zumo de frutas. Pronto estarás a mi lado. Siempre vienes. Oigo tus pasos, y me pregunto qué pasaría si no estuvieras allí.
A Tu Lado
A tu lado soy cual fuego que abrasa.
Tú eres el agua que ahoga mi llama.
A tu lado soy,
caminante perdido en el desierto.
Eres el riachuelo que mi sed calma.
Si estoy ávida
tan solo tú, mi apetito aplacas.
Junto a ti,
mi cuerpo no padece frío, tú lo arropas.
A mi lado tu cuerpo se hace a mi medida,
y te domino.
A mi lado estás como un niño, tan indefenso
que insubordino
y amas como si el tiempo pudieras parar
A tu lado, la alegría embrïaga
y es tan fácil olvidar
que lo nuestro un día podría acabar
Feliz lunes,
mi amor, gracias por estar ahí. Feliz semana a todos. Deseo que vuestros
corazones se llenen de paz, tranquilidad y alegría de vivir.
Precioso, Magda. Muchacha, mira que esta faceta nunca salio cuando eras mi profesora! :-)
ResponderEliminarSaludos desde Londres.
Gracias Mario, por el halago. Encantada de leerte, y ya lo siento que no conocieras esta faceta mía :-) Era recién graduada y trataba de dar la imagen más profesional y seria posible, teniendo en cuenta que la diferencia de edad con mis alumnos no era mucha.
ResponderEliminarUn abrazo